Vistas de página en total

domingo, 30 de julio de 2017

Amanecerte


Qué pasa Day,

56 días que no te doy la tabarra con mis movidas, han pasado tantas cosas en este tiempo...algunas más importantes que otras, pero bueno, sabes que todas te las habría contado en nuestro banquito o tomando una cerve en el Ledo. 

Ha sido duro no tenerte en vacaciones, Conil no ha probado la esencia de Dayvid, pero tu alma ha estado muy presente. Tanto, que todos/as hemos cocinado mejor que nunca, hasta hemos comprado pimienta (ese dichoso botecito por el que te echábamos la bronca por su elevado precio de 3e) y yo, no he tenido más narices que aprender a hacer café por no tener tu maravilloso colombiano. Fui a la playa, como cada verano para ver el amanecer, pero este no lo he podido compartir con tus ojos, y bueno, en la arena han quedado una cuantas lágrimas, en la papelera un par de cervezas y en el aire una conversación muda.
Sé que nos cuidas desde arriba, así que, te habrás echado unas buenas risas viendo nuestros días.

Cuentan conmigo para otro más en el cole, así que guay, cada vez voy teniendo más claro que estoy en lo que me gusta y me hace disfrutar, pero no le cierro puertas a nada, tengo algunas ideas en la cabeza, sabes que no puedo parar quieta y como tu me dirías "Ve por ellas". 

He recuperado parte de mi felicidad Day, he vuelto a dar patadas, como una enana, lo mejor es que es como si no hubiese pasado el tiempo, me siento fuerte, tanto, que me lanzaron al tatami con una italiana de metro sesenta con la cual me lesioné la rodilla, dándolo todo, pero oye tú, que la gané. Aunque el nuevo reglamento es una mierda... Queda pendiente saber si retomaré la competición, pero de momento, tocar el tatami es una auténtica alegría. 

¡El jueves me voy a Indonesia tío! ¡ Por fin! Me he comprado una mochila en la que quepo hasta yo (he perdido unos cuantos kilitos) y me he puesto de pastillas hasta arriba para no coger nada turbio de enfermedades en el viaje. Me voy en buenas manos, ojalá la hubieras conocido, ella me cuida, es fantástica. Vamos a ver mogollón de sitios increíbles, estoy segura de que va a ser un regalo para los ojos y un chute de energía positiva.

El tema del amor pues como siempre, perdido, y nunca mejor dicho. La verdad que estoy bien en la soltería, pero oye, que sigues siendo mi Celestino, échame una manita desde arriba que ves todo de maravilla y mándame a alguien que me soporte, y si ya en el pack viene incluido el que no me haga daño sería la creme de la creme.

Bueno amigo, tu pitufa te ha puesto al día (y faltan muchísimas cosas), ojalá pudieras contarme lo que has hecho tu estos días, pero estando ahí arriba es un poco jodido. 

Me voy a tomar una Red Vintage 1906 a tu salud ahora mismo. 

Te quiero.




martes, 25 de julio de 2017

Mi chica Prohibida

Mi chica prohibida...
por fin, ya no te espero.
Mi chica prohibida tiene 25, 73 maneras de colocarse el pelo y 200 de hacerle un guiño a la vida para salirse con la suya. Mi chica prohibida cocina de maravilla, escucha indie, lee poesía, baila sobre mis pies, canta como los  ángeles e improvisa con la guitarra como nadie. Mi chica prohibida tiene miles de pájaros en la cabeza, no tiene tiempo para aburrirse, es viajera y tiene afán por meterse en la boca del lobo, total, que más da, si es tan resolutiva que sale de Roma cuando quiere. Mi chica prohibida agarra fuerte, te pinta el cuerpo con caricias, y te habla bajito al oído, es muy de secretos, es muy suya y le cuesta hacerse de alguien. Mi chica prohibida tiene los cuatro elementos en la mirada, es calma y tempestad por dentro, es grito y cristal, es una fachada seria que se endulza con unas cuantas pintadas de colores que destapen sus inseguridades y le hagan sentirse cómoda. Mi chica prohibida pasa mi metro sesenta, es ligera como una pluma y preciosa como un diamante, le hace competencia al azúcar moreno y a la sonrisa de Julia Roberts, cuatro pendientes y un tatuaje en sus marcadas costillas decoran su cuerpo que es arte, su pelo rizado pide guerra por las noches y paz en los despertares, su boca, su boca... es inefable.  Mi chica prohibida tiene un perro con malas pulgas, es hija única, tuvo un novio hijo de puta, y una mujer que la hizo sentirse bien querida, no se enamora, quiere a su manera y quema sin darse cuenta. Mi chica prohibida es batalla, refugio, herida, cicatriz, cielo, infierno, sonrisas, lágrimas, sudor, frío, subidas, bajadas, idas, venidas, seguridad, descontrol... Mi chica prohibida es heroína, me engancha, crea dependencia y hace perder las formas, las maneras, las manos, el alma... me desnuda el alma. Mi chica prohibida odia la puntualidad, las injusticias, la política, la intolerancia, las pelis malas, la montaña, los huevos con patatas, los médicos, el deporte, las multas, conducir, Juego de Tronos... Mi chica prohibida me hace regalos pero no es detallista, no vive en clase turista, huele a vainilla, sabe a coco, se maquilla, viste Prada y a mi me viste de campo con solo mirarla, es indecisa, el armario puede con ella y tarda en arreglarse días. Mi chica prohibida es domingo de reencuentro, de recuerdos, de memoria, de alusión... no es presente ni futuro, es un fantasma del pasado, es desenterrar una rutina, es dinamita, que nos enciende, explota, y simplemente nos hacemos polvo una y otra vez. 
Mi chica prohibida es libre, y yo la respeto, por eso la quiero, dejándola ir, sabiendo que no somos nada, sabiendo que ya es jodido que seamos algo de nuevo. 
Por fin, ya no te espero. 

domingo, 16 de julio de 2017

Seguridad desmentida



Como vuelvas a darme la espalda
para recogerte el pelo y en tu
cuerpo un simple tanga negro,
yo, no me hago cargo de los
desperfectos.

Como vuelvas a estar tan bonita durmiendo,
me haré cargo de despertarte,
a besos, por todo tu lienzo que es arte,
por cada uno de tus lunares que hacen
constelaciones en el cielo.

Porque eres fuego,
vas a sacar al dragón que llevo dentro,
y encerrarte en lo más alto de la torre,
para saciar el hambre de tocarte, las ganas de
morderte el cachete izquierdo.

Como vuelvas a cruzarte en mis ojos
pasaré de esquivarte, chocaremos las 
pestañas y frenaremos para saborear 
luces de colores, despacio, sin prisa
porque se apaguen. 

Y es que...

Como vuelvas a sonreírme, 
te haré el humor hasta llegar al orgasmo, 
te devolveré 32 razones por las que te quiero,
convertiré tu miedo en maestría
...

Imagen relacionada
... y tu seguridad quedará desmentida.